sábado, 19 de septiembre de 2009

Por las trochas del conocimiento

Hace unos días conocí a una hermosa dama que semana a semana surca senderos solitarios con el deseo ardiente de llevar a unos chiquilines por la autopista del conocimiento.

PASIÓN MAGISTRAL
“Hay una deuda impagable con aquellos que
perdidos en las montañas siembran esperanza”
Indígena Blanco
A Clarybell Noval

Las oscuras tinieblas se cierran
la ignorancia galopaba rampante
acompasando los gélidos vientos,
la soledad la acompaña en la noche
gotas errabundas golpean los cristales,
los recuerdos confluyen certeros
la mente recrea momentos felices
la familia irrumpe en la memoria
lagrimas anegan bellas mejillas
solo las risas infantiles
guardadas en rincones escolares
regresan los ánimos errantes.

El tenue sol inicia labores
su cuerpo recibe el golpe acuoso
con rapidez prepara su alimento,
el corazón se sacude presuroso
no descubre la causa
su mirada se desparrama
escrutando el paisaje
¿Qué buscan sus ojos?
La presencia de sus amores
ya casi llega…
borran la entristecida noche
los chiquilines reviven la pasión
armados de lápices y cuadernos
solo para ellos vive.

sábado, 27 de junio de 2009

REMEMBRANDO SENDEROS

Hace pocos días tuve el agrado de encontrarme con un amigo, nacido en un agradable municipio de nuestro hermoso Departamento (sección territorial que se asemeja a un estado o provincia) de nuestro país Colombia, que me hizo recordar un poema que nació allí y que hoy quiero compartir con ustedes esperando la presencia de Tirso Gonzalez entre los lectores. No quiero pecar por engreído pero me gustaría conocer sus comentarios.
ÉTER PABLINO

Conocí un sacro lugar
no cualquier punto geográfico
allí disfruté tú aire inspirado
capté vibraciones circundantes
percibí el sonido de la pluma
acaricié la frescura de tus letras.
No, no fue en Chile
sucedió en una vereda lejana
el sino me arrastró allí
las gentes esperaban al gobernante,
sin esperarlo allí apareció
su presencia inundó el espacio
aquella sirena declamó
arrobó al auditorio
intenté, pero no pude escapar
los demás desaparecieron
solo era ella…
su voz arrullaba
gráciles manos danzantes
se movían al compás armonioso
de la palabra de su cuerpo.

Después disertaciones empalagosos
oradores de ocasión
los manteles se ocuparon
las viandas volaron
ceremonias anodinas
todos elogiaron su calidad
solo yo digería el aire impregnado de versos
abandonados flotando allí en el eter.
La luna desalojó al astro rey
apareció mi amiga noche vestida de estrellas
veleidosa la electricidad
se despidió para buscar amante
perseguida por su lujuria.
El jolgorio no quiso vencimiento
la música flotaba cristalina
se introducía en mi cerebro
escapada de un tocadiscos
cuya energía brotaba
del romance con las pilas;
la luz tenuemente despedida
de llamitas atadas a las velas
centelleaban en los danzantes,
sombras irreverentes
reflejadas en las paredes
se movían en exótico desden.
La penumbra fue cómplice
nos colocó una cita
allí en un rincón
las palabras se represaban.
¿En que momento se rompió el dique?
Ello no nos importó
nos invitamos a bailar
los cuerpos distantes
hablamos, emergió la poesía
nos acercamos quedamente
adosando sus labios a mi oído
fue desgranando uno a uno
“Los veinte poemas de amor”
la música la adobaba
ondas sonoras acariciaban mi cerebro
palabras fluían en mis venas
pulmones casi paralizados
las personas desaparecieron
nuestros pies no percibían el suelo
las horas desfilaron
pasaron sin notarse...
¿Ella lo disfruto?
Es la incógnita…

No era Temuco
pero si similar soplo
idénticas vibraciones
¿El papel? Mi canal auditivo
¿La pluma? Su boca
¿Lugar? Vereda Santa Rosa
¿Municipio? Coper
¿Departamento? Boyacá
¿Nombre de la sirena?
Se ha borrado
¿Su rostro?
Siempre fue difuso
su voz se extravió
¿Querer encontrarla?
Si sus ojos pasean ansiosos
las líneas de este escrito;
es posible la esperanza.
Ha desfilado tranquilo
más de un cuarto de siglo
mi mente aun recrea
ese sacro lugar
donde por labios femeninos
inmerso disfruté
la ambrosía difundida
en moléculas danzantes
del éter pablino.

domingo, 31 de mayo de 2009

Retorno al sendero

Después de largos meses sin tocar este blog quiero compartir un poema que marco la división de mi vida en dos. Sin mas comentarios lo publico.
DEFECTUS VIRTUS

Se agazaparon aleves
en las circunvoluciones mentales
luego de estas cavernas
emergieron uno a uno
hasta formar un escuadrón
me cercaron
me apabullaron.
Los miré
muchas veces coadyuvaron
a la derrota…
En ocasiones quise desaparecer
ellos sórdidamente sonreían

No era nada
oscuridad…
soledad..
felicidad lejana

Un día vino la luz
no una luz cualquiera,
hablo conmigo…
“Tu vales,
Tienes mucho que dar
deja tu vida en mis manos.”
Dije:
Señor Jesús, no puedo más,
Tómala

La vida se tornó diferente,
las circunstancias… las mismas
solo cambió la óptica.
Seguían saliendo de las cavernas,
en ocasiones poco a poco,
otras veces en manada.
Y me fueron enseñando,
empecé a conocerme
aprendí la prudencia
acompañada de sabiduría…
Florece en mi un hombre nuevo

sábado, 24 de enero de 2009

POR EL SENDERO DE LA PALABRA



Hoy deseo compartir con mis amigos de la palabra una composición que trata uno de los problemas ancestrales de nuestro país y que lamentablemente tiene mas prensa que las bellezas de toda índole que poseemos: La violencia. Desde antes de la conquista la sangre de los nativo corría porque había una lucha entre dos grandes pueblos: Los Chibchas y los Caribes, que pugnaban por el dominio del territorio y cuando llegó el conquistador, que por cierto no era de los mas nobles, ambos lo vieron como el aliado para vencer al oponente, lógicamente después que descubrieron su humanidad. Por todos es sabido que la presencia del europeo se hizo "a sangre y fuego". Posteriormente vino la esclavitud de un pueblo que se sustrajo de su tierra nativa con métodos lejos toda humanidad. En los próximos recodos seguiré tocando el tema porque estamos hablando de poesía.
Cuando se masacraron a los once diputados de la Asamblea del Departamento del Valle (Departamento es una división política que se asemeja a un estado provincia) hice una unión de uno de las hermosos y humanos poemas de uno de los mas grandes dramaturgos , que por cierto tiene como autor otro alemán que sufrió persecusión de Hitler,con uno que tenía "volando" por ahí y que ya he presentado en recitales.

Agradezco la colaboración de mi colega poeta de la muy amada Republica de Ecuador, Siomara España, quien aclara que el poemas que se ha atribuido a Berthol Brech es de autoría de Martin Niemöler. Es posible que ambos trataron el tema.

IN MEMORIAN PARA ONCES MARTIRES

Primero se llevaron a los negros,
pero a mi no me importó
porque yo no lo era

Enseguida se llevaron a los judíos,
pero a mí no me importó,
porque yo tampoco lo era.

Después detuvieron a los curas,
pero como yo no soy religioso,
tampoco me importó.

Luego apresaron a unos comunistas,
pero como yo no soy comunista,
tampoco me importó.

Ahora me llevan a mí
pero ya es tarde

Bertold Brech y /o Martin Niemöler

CRUCES

Cruzan disparos

cruzan personas

cruzan cadáveres

cruzan viudas

cruzan lágrimas

cruzan tristezas

cruza la violencia

cruzan los secuestrados

cruzan niños armados

cruzan los desplazados

cruzan las cruces.

Cruzan los poetas

cruzan los escritores

cruzan los artistas

cruzan los enamorados

cruzan las risas

cruza la vida

cruzan los constructores

cruzas tú

cruzo yo

cruza el amor

cruza la paz

cruza Colombia.

Y SIGUE LA ANDARIEGA POESIA


Deseo compartir un poema que nos ubica en el tiempo anterior a la leyenda de "EL DORADO" y que marcó el intereés del conquistador español.


TRISTEZA EN LAGUNA

" AMOR
Viene en el ser sin forma presentada,
viaje en la voz con indeciso vuelo,
desata la palabra estremecida
y asciende por la escala del anhelo"
LAURA VICTORIA

Al amparo de las sombras

la hermosa Chía se maquilla
aprovechando la sacra laguna
como níveo espejo.
¿Por qué el agua es nuestra vida?
¿Por qué para mi es muerte?
¿Por qué fue mi ruina?


Es la vida de mi raza
sin ella reina la muerte.

Ahora mis lágrimas de hombre
acrecientan su caudal,
Laguna de Guatavita.


No quisiera recuerdos
luchan por salir
los pretendo ahogar
la chicha no me narcotiza.
Los lujos me aburren
las finas mantas
las ollas primorosas
las esmeraldas

las aborrece mi ser.
Las fragancias, otrora agradables
me producen repugnancia;

las antorchas y fogatas

exhalan luces negras.
El amor no existe
solo vacíos profundos.
Mis vasallos son molestos

la cabeza pretende ignorar

la realidad de mis bastos dominios,
los ejércitos vagabundean

caminan cual samuros acéfalos.


Era toda una diosa

encarnada en mujer
bella entre las bellas;
muchos caciques asediaron

tribus apetecieron como princesa.

Tortuoso fue la senda
logre llegar a ella.
mi gran amor fue recompensado,
mi tribu irradió alegría

no por pocas lunas,
vino prosperidad,

la felicidad acompañante

demoró en marcharse.

Un día engendró una joya
hermosa chiquilla;

el mensajero la anunció

solo inspiró desprecio

al mirarla dibujó una sonrisa

me postré como esclavo;
rebosante de júbilo

dejé que redujera
tiempo a mi esposa.
Responsabilidades se aumentaron
distintas mujeres me buscaron
las horas resbalaban
obligaciones me adsorbía,
llegaron bacanales…
y el fuego del amor
pareció apagarse.
Ella quedó desamparada

mis olores se alejaron.
Su belleza, mis deberes
se enlazaron en cruel destino;

mis guerreros la sitiaron

enjambres de ojos

inundados de lascivia..
Ello no ocupó mi mente,
seguía hermosa
embriagadoramente bella.
Aún me buscaba con ardor
menospreciaba sus encantos,

el placer se conjugaba
al juguetear con mi hija.


Hace unas lunas
la cacica solicita me atendía
con totumadas de fermento,
bebidas con avidez
los sentidos se ausentaban.
Las primeras semanas
de cuando en cuando

después ya rutina
Cuando las sombras caían

uno de mis guerreros

el mas fiel de ellos

merodeaba el bohío

parecía vigilarlo,

y lo agradecí.

Mi cacica impaciente
miraba arrobada el lugar
donde el mocetón desaparecía.


Una de las ancianas
una mañana cualquiera

con mirada maliciosa

como ocultado secretos
preguntó solícita:
"¿Como llegó la Princesa?
Porque madrugó a llegar"
reí mirándola con desprecio

una aguda lanza penetró

mi corazón casi revienta.


La bella Chía apareció
me negué a beber
mantas abrazaron mi cuerpo;

sus gráciles pies inquietos

la llevaban a la puerta

su mente la hacía regresar;

llamarada de celos refulgieron

mi cuerpo tembloroso fingió dormir
Abrigándose intentó salir;
susurré su nombre,

sus huesos se estremecieron...
se acercó erizada.

Cuando la blanca Chia

abandonaba su reino

entregándolo a Sua
fui a buscar al mohán mayor
convirtió a doce de sus fieles
en búhos y lechuzas,
esa noche bebí desesperado.
Los insomnes animales
la seguían, lo miraron todo.
los rayos dorados del astro rey
acariciaron mi cara
con ellos llegaron los espías
acompañados de miedo
narraron los hechos.


Con la decrépita mujer

organizamos el festín,
la princesa lucia esplendorosa
su mirada escrutaba rostros
no encontró el rostro anhelado,
llegó el momento del banquete

ante sus ojos apareció
aparentemente y bien aderezado

un corazón de venado
lo consumió con desgano

sus ojos fueron lagunas
sospechando tragedia.
Luego el plato principal.

reconoció el miembro viril de su amante
lanzando gritos desgarradores
desapareció enloquecida..
Mis zalameros nobles rieron
pensé libando néctar de maíz,

"ya todo concluyó".
Lo peor estaba caminando.


La nodriza de mi caciquilla
temblando desgranó los hechos
"Llegó al bohío real

testigo de amores puros
abrazó la pequeñuela
quiso mi compañía
subimos trabajosamente
apareció la laguna,

entre mis lágrimas presencie:
su manta hecha jirones
sus tiernos pies bañados en sangre
el rostro lacerado por las hojas
lagrimas corriendo a raudales
Chía iluminaba la noche..
la naturaleza se paralizó
el silencio era el rey
parecía presentir la tragedia
trabajosamente trepó la roca
sus ojos se llenaron de laguna

aprisionado a su hija
me ordenó relatarlo todo
se lanzó buscando el abrazo líquido
gritando: "¡Bachué socórreme!!!
ambos cuerpos besaron las aguas"
Una lanza grande, muy pesada
atravesó mi corazón
entre nubes negras

logré construir una orden:
¡¡Corramos a la laguna,
las podemos rescatar!!!


Ya se había aquietado
los árboles en silencio.
Chía se reflejaba en su superficie

tarde comprendí cuanto la amaba
no solo a ella, a las dos.

El mohan mayor espumado
ordené a mis chamanes
realizar sus mejores conjuros
a los guerreros iluminar la noche,

los nadadores a caminar su fondo

El tiempo siguió con lentitud
el recorrido trazado por los dioses.
Uno de los hombres emergió
transportaba a la niña en brazos
el cuerpecillo dorado sin ojos
consumidos por la serpiente sagrada,
ordené su regreso a la tumba de oro...
El bohío crece cada día
la soledad es fiel compañera.


Un rumor caminó por el caserío,
uno de los nadadores
vio a mi princesa feliz
en un palacio sumergido en lo profundo
se había desposado con el rey serpiente.
Después otro...
la cacica se paseaba sobre las aguas
en noches de plenilunio
hablando de tiempos futuros
de hombres sanguinarios

fieras sedientas de oro

demoliendo aldeas

violando ,segando vidas.

Estos los menosprecié
mis ojos añoraban su rostro

mi cuerpo se moldeó en sus orillas

el bohío no volvió a mirarme
la vi levitando en sus aguas

y pregonando desastres,
tomaba su etérea mano

mi boca buscaba infructuosa la suya
luego la abrazaba...
muchas veces mis guerreros
me retiraban suavemente
de esa roca a la cual me aferraba
cubriéndola de besos.


Mis vasallos la aderezaron con obsequios

su fondo en pleno día casi brillaba
pretendían calmar la sed de dioses
evaporar la tragedia anunciada.
Laguna de Guatavita

tus gotas vitales para mi pueblo
son para mi, torturas inconmensurables.


Jorge David Castellanos Velandia
“Indígena Blanco”

Belén, 20/09/07

Bibliografía


ARANGO CANO, JESÚS. Mitos, leyendas u dioses chibchas. Plaza & Janés Editores- Colombia Ltda. 1988.
CONDEZA VON PODEWILS-DÜRNIE, GERTRUDIS. Chigys Mie (Cosas pasadas) Editorial Cromos. 1930
GALINDO CABALLERO, MAURICIO, CARLOS AUGUSTO GARCIA LÓPEZ Y JORGE VALENCIA CUELLAR. Mitos y leyendas de Colombia, tradición oral indígena y campesina. Intermedio Editores.
LÓPEZ OROZCO, ASDRUBAL. Editorial Educativa Kolor. Primera edición

viernes, 2 de enero de 2009

La poesía sigue su caminar

Hoy deseo compartir poemas que van desde lo epico, romantico y erótico.

LOA A UNA TRAICIÓN

“A los indígenas la policía les dio garrote durante sus luchas, a nosotros nos respetaron” Edgar, un maestro caminante

Una lanza,

una lanza aliada

me atravesó

penetró por la espalda

llegó hasta el alma.

Mi sangre regó

la tierra sagrada

que vendí al mejor postor.

Las lágrimas como río impetuoso

mancharon la hierba,

solo las piedras escucharon

ininteligibles gemidos,

mis hermanos de raza

se alegraron con mi muerte…

Confirmé su realidad

cuando bajaba

al centro de la tierra

cruzando el gran río

en la barca fabricada

con telas de araña

ahora hablo desde los caminos

y barrancos de tierra amarilla,

En la otra vida

fui conocido como Pacanchique

hijo preferido de Baganique

otrora gran señor

de las tierras de Ramiriquí.

Era su heredero

pude haber gobernado

pero no fui cacique…

¿En qué momento lo perdí todo?

Quizá cuando el amor despertó

mi juvenil corazón;

ah Naganta, mi Naganta

de grandes y hermosos ojos negros,

negros de ver endrinas

cautivadores, delicados.

Su piel morena,

en ella los dioses

depositaron el encanto

la suavidad al tacto

la textura

de nuestra tierra sagrada.

Sus labios delineados

por el cincel de un artista

de los cuales brotaba

cantarina y pura

la voz de Bachue.

Los dientes que muchas veces

mordieron suavemente mis carnes

tan blancos como gránulos de maíz

bien alienados como en una mazorca tierna.

Su elegante cuerpo parecía

no haber salido de un ser humano

fue forjado en los talleres cercanos al sol,

caminaba cimbreante

como chizos movidos por la brisa.

Cuando paseábamos las miradas

nos perseguían,

unas con admiración

otras pletóricas de envidia,

siempre los murmullos nos seguían…

El tirano organizó en Hunza

una gran fiesta

mi padre como su gran amigo

tendría el sitio de honor,

yo como su heredero

lo debía acompañar,

insistí en llevar a mi amada

ese fue mi primer error.

El cruel Quemuenchatocha

con mirada lasciva

pretendió ocupar mi lecho nupcial

y la llevó a su harén,

mi padre y mi familia se humillaron

le rogaron de rodillas

y el bastardo no escuchó,

nos repudió.

Colmados de tristeza

y caminando a nuestra tierras

urdimos un plan…

mi padre arrancando unas nobles hierbas

unas las mezcló con tierra,

otras con agua cristalina de un arroyo,

me indicó como usarlas

y partí en busca de mi princesa

cuando el color plateado de la noche,

se dejaba ver en los dominios del déspota

cual cazador furtivo me acerqué

a la prisión elegante de Naganta

Los guardias durmieron al probar la bebida,

mi amada se resistió al principio,

al percibir el suave aroma

de aquel elixir

fruto de la mezcla de hierbas

y el sudor de mi mano

reclinó su tierna faz en mi hombro

fue presa de bellos sueños:

en mis brazos la llevé,

flotando en las nubes del amor

y las alas de guincha en mis pies,

a donde Baganique

impaciente esperaba.

“Hijo recupere el tálamo que le quisieron robar…

yo estaré vigilante por si nos descubren”

besando sus nudosas manos agradecí.

Con besos suaves,

acompañado de la luna

con el ulular de los búhos,

el canto de la cigarras

despertó,

me quiso hablar,

la cerradura de nuestros labios

lo impidieron.

nos quitamos las mantas

nuestras bocas recorrieron

hambrientas los cuerpos,

el sudor se confundió

con el aroma de la noche

nuestras carnes palpitaron

los gemidos hicieron coro

con los animales nocturnos,

las manos recorrían

cada rincón de nuestros cuerpos…

Gritos lejanos

gritos cercanos

la noche se paralizó…

“Hijos nos descubrieron,

vienen los soldados del Zaque;

huyamos”

Rápidamente nos vestimos

nos cayeron los zamuros,

Naganta tropezó,

la apresaron

intenté ayudarla..

Solo la escuché gritar:

“Huye, mi amado, huye”

Nos miramos y escapé,

me oculté en la oscuridad…

Escuché a mi padre gemir

a mi amada gritar;

quise salir de mi escondite

la cobardía paralizó mi cuerpo,

perdí el sentido.

.

Perlas de rocío me despertaron

agazapándome me acerqué a Hunza

estaba desolada

la vocinglería de la turba

me indicó el lugar fatídico

en la cumbre...dos horcas

dos cuerpos se balanceaban…

Baganique y Naganta.

Llorando como mujer me arrodillé

miles de pensamientos se agolpaban

la sed de venganza se hizo presente,

el tiempo desapareció…

Regresó cuando una mano se posó

en mi hombro,

miré a una mujer,

su rostro ensangrentado

además muy cansado,

su manta echa jirones

sus pies destrozados.

Me habló suavemente.

Sin parar derramé la historia

en una cascada de palabras;

me habló de unos seres extraños

aparecieron en su tierra Bacatá

a veces caminas con cuatro pies

luego en dos

con pieles brillantes y duras

con palos cual truenos

vomitando fuego

y otros que cortaban indígenas.

Con cabezas raras

peludas caras

buscadores de oro.

Una chispa atravesó mi cabeza,

ellos ayudaran a mi venganza

les daré el metal que quieren.

Los buscamos

nos humillaron

nos humillamos

nos entendimos

y los guiamos

primero a Hunza

allá los dioses

me premiaron con la venganza

al despótico tirano.

Ello no me sació

quise acabar con Suamox

vi el templo sagrado arder.

Mi odio los quería llevar

cerca de los montes muy fríos.

De regreso a Hunza,

en las llanuras de Bonsa

enjambres de indígenas,

abejas asesinas nos atacaron.

los hermanos de raza cayeron

arrasados por nosotros,

me sentí feliz

viéndolos morir,

mi cuerpo servía a la venganza.

De un indígena muerto

tomé su corona de plumas

y armado de flecha y arco,

cuando pretendía disparar

a uno de mi propia raza

uno de los blancos me clavó

su lanza en mi espalda.

Con el sabor de sangre

apañando la hierba

con mis crispados dedos

tarde comprendí

lo de un tal Judas.

Vi llegar al hermano

armado de su red

para atraparme.

Así merecía morir

fui uno mas de los traidores

de mi propia raza…

esta especie de hombres

mueren por la espalda.

Estoy viendo

los bohíos dorados

hermosas labranzas

mis antepasados disfrutan

y yo sintiendo azotes

traspasando

mis carnes inexistentes

penetrando en mis profundidades

atormentándome durante infinidad de lunas.

En nuestro país hay unas personas que en estas fiestas no han estado cerca a sus seres queridos y que todos los colombianos anhelamos ver libres.

PRISIONEROS SIN DELITO

(Para los que aún quedan)

Suave rumor

no es de libertad

tampoco saludo maternal,

suave rumor

se golpea el cambuche

no es alegría musical,

suave rumor

presencia de ser misterioso

ligero estremecimiento

se golpean los eslabones,

suave rumor

serpenteo cercano

silbido reptilineo

respiración acelerada

las cadenas tornasen pesadas

sonidos de alimaña huyendo

sudor pegajoso

silencio peligroso

sueño ausente.

Una noche mas

lejos del hogar

con amanecer de esclavitud

Hay un poema que unos consideran erótico y otros no, lo dejo a su consideración:


PAPEL

Tengo las palabras

construí versos,

no puedo plasmarlos

tienes lo que falta

préstame tu piel

allí escribiremos poemas.

Termino compartiendo uno que ha gustado a los intelectuales como a personas sencillas:


CULPABLE
 
Todos te acusan
tu abogado no te defiende
el fiscal te señala
el jurado está de acuerdo
la sala en pleno te culpa.
No hay argumentos
nada te absuelve
 yo estoy de acuerdo.
Se buscan evidencias
allí están
es mas, tu las tienes.
Son pruebas tus ojos,
hay testimonio en tu boca
tu nariz te acusa,
tu cara lo denuncia,
tu cuerpo lo declara.
Tu voz no se escucha
si hablas hay mas pruebas.
El tiempo pasa
todos te miramos.
¿De qué se te acusa?
Dice una voz
 eres culpable;
¿El delito?
al fin preguntas,
todos respondemos:
Eres bella.
 
Jorge David Castellanos Velandia
 
INDÍGENA BLANCO